La gastronomía griega se caracteriza por sus sabores variados y la sencillez de su elaboración. La dieta que prima es la mediterránea, pero también tiene influencias italiana, balcánica y de Oriente Medio. Los ingredientes básicos son el aceite de oliva, las especias y una gran variedad de condimentos y verduras frescas, entre ellas tomates, berenjenas, judías verdes, patatas, cebollas, pimientos y alcachofas, así como pescados y carnes.